
Explora el Castillo de Guimarães, una de las siete maravillas de Portugal. Descubre su historia, arquitectura y consejos para tu visita.
El Castillo de Guimarães no es solamente una de las joyas de la ciudad, sino que también destaca por ser una de las siete maravillas de Portugal, un reconocimiento que comparte junto con el Castillo de Óbidos, el Monasterio de Batalha, el Monasterio de Alcobaça, el Monasterio de los Jerónimos de Belém, el Palacio da Pena y la Torre de Belém.
Sin duda, el castillo es un referente de la historia y cultura portuguesa, pero quizás te estás preguntando, ¿y por qué este reconocimiento? Guimarães es conocida por ser considerada la cuna de Portugal, algo que la ciudad cuenta con orgullo a través de la frase “Aqui Nasceu Portugal” que se puede encontrar por varios de sus rincones. Puede que esto sea una de las razones de este reconocimiento, pero aquí te queremos contar un poco más sobre la historia de este castillo.
Todo comienza en el siglo X, cuando la condesa Mumadona Dias, de quien se dice era gallega, mandó construir una fortaleza para proteger a los monjes del monasterio y a la comunidad cristiana de los ataques de los musulmanes y normandos.
A finales del siglo XI, con la creación del condado Portucalense, que más tarde sería el actual Portugal, los condes Dom Henrique y Dona Teresa decidieron ampliar y mejorar el castillo. Estos condes son los padres del primer rey de Portugal: Afonso I, quien se cree que nació en este mismo castillo y quien jugó un papel crucial en su historia, especialmente tras la batalla de São Mamede, donde derrotó a las tropas de su madre. Esta victoria impulsó distintas reformas que definieron al castillo y que resultaron en el aspecto que podemos ver hoy en día.
Con el crecimiento del reino, el castillo fue perdiendo relevancia al irse alejando de la frontera. Tuvo cierta importancia militar en eventos como la Guerra Civil de 1321-1324, pero a medida que pasaron los años, el castillo cayó en decadencia y abandono. No fue hasta finales del siglo XIX que se redescubrió su valor y se le consideró Monumento Nacional. A partir de este momento se realizó un proceso de restauración, logrando el estado actual que podemos admirar ahora.
Como ves, el castillo cuenta con muchísima historia que también se puede descubrir a través de su arquitectura y de los diferentes estilos que vemos en ella.
Tras su construcción, que originalmente estaba hecho con madera y barro, recibió una primera gran reforma de parte de los padres del rey Afonso I, la cual se puede ver especialmente en la fachada norte del castillo, donde la base de los muros cuenta con unas grandes piedras que destacan frente al resto de la arquitectura.
Durante el mandato de Afonso I, se realizaron nuevas reformas que ampliaron el perímetro del castillo, creando la forma que tiene hoy en día. Además, con la llegada del estilo gótico, se añadieron las ocho torretas características del castillo, cuatro de las cuales se encuentran en las dos puertas de entrada.
El Castillo de Guimarães es una visita imprescindible para cualquiera que explore la ciudad. Si quieres visitar tanto el Palacio y el Castillo por dentro y sin colas, te recomendamos nuestro tour del Palacio y el Castillo de Guimarães, con el que descubrirás todos los secretos e historias de estos monumentos.
También te recomendamos recorrer el casco histórico de Guimarães, y si te animas, unirte a nuestro free tour en Guimarães para conocer aún más sobre esta ciudad.