Si hay una ciudad en el mundo que puede visitarse y disfrutarse a través de sus plazas, estamos hablando de Lisboa. La Plaza del Comercio en Lisboa te da la bienvenida a la ciudad y es una de las partes más importantes de la historia lisboeta.
La plaza del Comercio de Lisboa es una de las más grandes de Europa y es la primera fotografía de la ciudad
¿Te gustaría conocerla con detalle? Pues ven con nosotros. Te lo contamos a continuación.
La historia de la Praça do Comércio se relaciona estrechamente al terremoto que sacudió la ciudad en 1755. La nueva plaza fue creada precisamente después del terremoto para sustituir el Palacio Real, destruido en el incidente y con el fin de acoger los nuevos edificios institucionales del gobierno de la ciudad.
Tras el seísmo, el marqués de Pombal, principal artífice de la Lisboa moderna, decidió reconstruir esta plaza que pasó convertirse en el punto de arranque urbanístico de la nueva ciudad.
Asomada al Tajo la plaza del Comercio presenta una estructura de edificios porticados en tres de sus lados. Es, sin duda alguna, el kilómetro cero de la ciudad. Por su emplazamiento privilegiado, sirvió durante décadas de puerta de entrada al tráfico marítimo mercante que llegaba a Lisboa desde ultramar.
Desde su reconstrucción, la plaza ha sido testigo de acontecimientos históricos muy relevantes, como el atentado contra el rey Carlos y su hijo Luis Felipe a comienzos del siglo XX o el levantamiento militar de 1974, durante la Revolución de los Claveles que derrocó el régimen salazarista.
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La plaza del Comercio, también conocida como Terreiro do Paço, es siempre el punto de referencia a la hora de manejarse en Lisboa. Desde aquí podremos acceder a la Baixa, al Barrio Alto o al Chiado, los tres barrios fundamentales en torno a los cuales se estructura el centro de la ciudad.
De hecho, la plaza nos servirá como punto de salida de la mayoría del transporte público de la ciudad con las líneas de transporte público para todo Lisboa e incluso para las localidades de las cercanías como Sintra o Estoril.
La plaza del Comercio se asoma por su lado sur al Tajo. En la orilla, desde la estación fluvial Cais de Sodré, parten las excursiones por el Tajo y los barcos que cruzan el río hacia las distintas excusiones que te acercan a distintos puntos de la ciudad. Para empezar nuestra ruta hay tres puntos en la plaza de especial interés:
El Arco Triunfal da Rúa Augusta fue diseñado por el arquitecto Santos de Carvalho para celebrar la reconstrucción de la ciudad después del gran terremoto. Su construcción finalizó en 1873 y sus estatuas representan a personajes históricos de gran importancia en la ciudad como Vasco de Gama y al Marqués de Pombal.
El arco pone el punto de arranque a la calle Rúa Augusta, la extraordinaria arteria peatonal y calle más importante de la Baixa. Aquí empieza la gran Lisboa y podrás empezar a disfrutar de la animación y de la vida comercial de la ciudad.
Pero si quieres divisar una panorámica imponente, lo mejor es subir al mirador del arco de la Rúa Augusta. Podrás ver desde una perspectiva diferente la Baixa y también el castillo de San Jorge y la Catedral.
También conocido como muelle de las columnas. Es el lado que se abre al Tajo. El nombre viene dado por dos columnas que se alzan sobre el agua.
Esta era la zona a la que llegaba todo el comercio marítimo y también las autoridades que desembarcaban en la ciudad. Aquí eran recibidos solemnemente por el rey y entraban en la ciudad. Una de las imágenes favoritas de la ciudad es el atardecer sobre las aguas del río. No os lo perdáis.
Es otra de las fotografías típicas de la ciudad. Esculpida por Machado de Castro en 1775 representa a José I, rey portugués que estaba al mando durante el terremoto de Lisboa.
De 14 metros de tamaño, representa también a otras figuras que hacen, a partes iguales, referencia y homenaje a la reconstrucción del país. Junto al rey veremos un caballo pisoteando a los enemigos, figuras con las palmas de la victoria, la escenificación de la Fama. También se representa el escudo real y el Marqués de Pombal.
La Plaza del Comercio es uno de los puntos neurálgicos de la ciudad. Especialmente atractivo es el restaurante Martinho de Arcada. Abierto en 1778, durante el proceso de reconstrucción de la ciudad, es el más antiguo de Lisboa y forma parte de su historia viva.
Local habitual de los grandes de la literatura de Portugal, conserva una mesa en honor a Pessoa, uno de sus habituales. Una excelente oportunidad para degustar la típica cocina portuguesa en el marco de un ambiente histórico único o para hacer un alto y tomarse un café.
La Plaza del Comercio es el punto de encuentro entre miles de visitantes de todo el mundo. Si quieres algo más que una visita rutinaria en Lisboa, déjate llevar. Participa con nosotros en un free tour Lisboa y podrás conocer las historias y las anécdotas que te harán ver la ciudad de una forma diferente ¿Te animas?
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